¿Qué período de la vida recordamos mejor?por Andrés Sardinero
Quizás en alguna ocasión nos haya surgido ésta pregunta. Seguro que cada uno tiene su propia idea al respecto. Algunos dirán que lo que más y mejor recordamos es la infancia, otros apostarán por la adolescencia, y así cada cual puede aventurarse y tener su propia interpretación sobre el asunto. Y tú, estimado lector, ¿qué opinas? Cuando una persona se hace mayor y pertenece a la tercera edad, ¿cuál será el período de su vida que recuerda con más frecuencia y claridad? La Psicología ya tiene una respuesta científica bien fundamentada.
La memoria autobiográfica está formada por nuestros recuerdos personales, es el almacén donde se depositan los sucesos más importantes que hemos experimentado a lo largo de todo el ciclo vital. Obviamente, cada persona dispone de sus propios recuerdos autobiográficos, más o menos ricos, más o menos amplios, más alegres o más tristes. Pues bien, un método para estudiar la memoria autobiográfica se conoce como recuerdo con palabra – clave.
El método de recuerdo con palabra – clave fue ideado por Sir Francis Galton en 1879 y retomado un siglo después por Crovitz y Shiffman, en el año 1974. El método consiste en proporcionar una palabra a partir de la cual la persona ha de recordar cualquier acontecimiento de su vida que esté vinculado con ese concepto, y luego ha de fecharlo, diciendo que edad tenía cuando sucedió.
Por ejemplo:
– Investigador.- Escucha ésta palabra: “restaurante”. Quiero que me digas cualquier recuerdo personal relacionado con un “restaurante”.
– Participante en el estudio.- La palabra restaurante me recuerda a una vez que estando con mis padres la cena nos salió gratis, porque al camarero se le escurrió un plato de sopa sobre la mesa y montó un gran alboroto. Para compensarnos, el dueño del restaurante nos invitó, pero nosotros no estábamos disgustados, todo aquello nos pareció muy divertido, lo pasamos muy bien.
– Investigador.– ¿Qué edad tenías cuando sucedió?
– Participante en el estudio.- Tendría unos… 22 o 24 años más o menos.
Las palabras – clave que se aportan pueden ser de lo más variopinto. Pueden referirse a lugares (ej.: el circo, el restaurante, la playa, la montaña, etc.), a objetos concretos (una silla,un reloj, un libro, etc.) o a emociones y sentimientos (ej.: alegría, tristeza, dolor, asco,vergüenza, etc.) Normalmente, se elaboran listas largas de palabras – clave para cubrir el máximo posible de temas y momentos de la vida. En numerosos estudios científicos, siguiendo éste procedimiento de palabras – clave con un gran número de personas sanas pertenecientes a la tercera edad, se ha observado una y otra vez un mismo patrón de distribución de los recuerdos a lo largo del ciclo vital. Veamos la gráfica a continuación:
Las memorias de los primeros años de la vida son prácticamente inexistentes. Antes de los 5 años apenas disponemos de recuerdos claros y fiables, fenómeno que se conoce como amnesia infantil. Esto se debe a que hasta los 5 años no se han desarrollado lo suficiente aquellas estructuras del cerebro que permiten codificar y almacenar las experiencias personales. Sencillamente los sucesos no han podido ser fijados en nuestra mente porque el cerebro se encontraba en pleno desarrollo.
De los 10 a los 30 años disponemos de una gran cantidad de memorias. Es el período de la vida que mejor se recuerda. De manera desproporcionada, con el procedimiento de palabras –clave se evocan muchos sucesos de ésa época, parecen ser menos susceptibles al olvido y quedan grabados en la memoria como a fuego. A ésta “desproporción” del recuerdo se le ha llamado científicamente pico de reminiscencia, por la forma de montaña que aparece en la gráfica. Es lógico cuestionarse por qué los sucesos de los 10 a los 30 años son más fáciles de recordar en comparación con otros períodos. Tengamos en cuenta que en esa época tienen lugar algunos de los acontecimientos más importantes de nuestra biografía: “sufrimos” el primer amor, terminamos nuestros estudios académicos, contraemos matrimonio, tenemos hijos, encontramos el primer trabajo, etc.
Después del pico de reminiscencia, pasados los 30 años, sigue un período en el que la cantidad de recuerdos disminuye.
Por último, los acontecimientos que están más cerca de la tercera edad se recuerdan mejor.Tengamos presente que los estudios se hacen con adultos – ancianos y para ellos, los sucesosde los 50 años en adelante están más próximos en el tiempo. Se trata de un efecto de ultimidad: los eventos más cercanos en el tiempo se recuerdan mejor.
Ya seamos profesionales que trabajamos con personas aquejadas de problemas de memoria o seamos familiares cuidadores de un enfermo, podemos preguntarnos como utilizar el pico dereminiscencia como una herramienta que ayude al mantenimiento o recuperación de la memoria. Próximamente intentaremos abordar la cuestión en otra entrada del blog.
Autor: Andrés Sardinero Peña
Psicólogo Especialista en Neuropsicología
Baddeley, A., W. Eysenck, M., & C. Anderson, M. (2010). Memoria. Alianza.