El exceso de higiene podría favorecer la aparición de Alzheimer
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Todos reconocemos la importancia de lavarnos las manos antes de comer, pero lo que no conocíamos hasta ahora es que estas costumbres de higiene podrían aumentar la posibilidad de desarrollar Alzheimer. Según ha descubierto un grupo de investigadores de la Universidad de Cambridge, no tener suficiente contacto con los gérmenes podría causar el desarrollo del Alzheimer.
¿Por qué la higiene podría causar Alzheimer?
La buena higiene afecta negativamente al desarrollo de las células blancas llamadas células T, que están en nuestro sistema inmunológico y tienen como objetivo luchar contra los gérmenes que afectan negativamente al sistema inmune. Como resultado, la persona puede sufrir una inflamación en el cerebro, síntoma característico del Alzheimer.
Los científicos han descubierto que un hábito tan común que supuestamente es positivo para nuestra salud, puede ser perjudicial. Debido a que tenemos poco contacto con los gérmenes, nuestro sistema inmunológico se encontraría débil en el casos de tener que luchar contra las bacterias, ya que no le damos suficientes oportunidades para hacerlo a menudo.
Unas costumbres tan habituales como lavarse las manos con frecuencia y ducharse a menudo afectan al desarrollo de las células blancas de la sangre, las cuales son muy importantes para nuestro sistema inmune.
Los países desarrollados tienen más riesgo
Podemos concluir que los países cuyos ciudadanos se preocupan más por su higiene tienen más casos de Alzheimer. De esta manera, la investigadora principal del estudio, Molly Fox, ha señalado que más de la mitad de los pacientes de Alzheimer son de países desarrollados. Fox predice, además, que en 2025 más del 70 por ciento de pacientes de Alzheimer vivirían en países desarrollados.
El informe publicado en la revista ‘Evolution Medicine and Public Health’ destaca un hecho muy interesante, que sin embargo no se puede interpretar como el único factor de una enfermedad. Hacer ejercicio cada semana, alimentarse de manera sana y controlar la presión arterial y el colesterol son algunas maneras importantes para prevenir la enfermedad.